>>EVALUACIÓN DURANTE LA
ENSEÑANZA<< Act. 4
¿Cómo
apoyar la toma de decisiones durante la enseñanza a partir de la evaluación?
Como bien se menciona en varios textos, la
evaluación es de gran importancia dentro de la toma de decisiones en el proceso
educativo, ya que es a través de ella que el docente analiza y determina si las
estrategias o metodología que emplea para impartir el contenido es eficaz o si
requiere de modificaciones y cambios que potencien al máximo el aprendizaje de
los alumnos.
También podemos decir que la evaluación es un gran
apoyo para identificar deficiencias y logros que se van adquiriendo día a día
dentro del salón de clases. Siempre sin perder de vista las necesidades de
nuestros jóvenes, las decisiones que tomemos como orientadores nunca deben
declinar este objetivo.
Ahora bien que si deseamos ser lo más asertivos
posible, tenemos que detenernos a observar, analizar, criticar (también nuestro
desempeño como docentes) y a partir de ello tomar la mejor decisión para
cumplir con los propósitos de la enseñanza.
¿Cuáles
son los aspectos e indicadores a considerar en la toma de decisiones?
M Niveles de interés
de cada alumno y el grupo en general
M Problemas evidentes
o potenciales de conducta
M Conveniencia de la
técnica o de la actividad didáctica que se utiliza
M El alumno al que
debe interrogarse a continuación
M Corrección de las
respuestas del alumno
M Ritmo de la
instrucción
M Utilidad y
consecuencias de las preguntas de los alumnos
M Transiciones fluidas
de un concepto a otro
M Utilidad de los
ejemplos con que se explican los conceptos
M Grado de comprensión
por parte de cada alumno y del grupo en su conjunto
M Conveniencia de
iniciar una actividad o darla por terminada
¿Cómo
mejorar la evaluación durante la instrucción?
La evaluación que se realiza dentro del salón de clases,
atiende a diversos factores pero los principales podrían ser: la observación
que el docente hace del comportamiento y conductas del educando, la información
que tiene sobre sus estilos y formas de aprender, realizar las adecuaciones
para que la instrucción sea eficaz y significativa; además de todo lo anterior el
maestro debe brindar y establecer un ambiente agradable para cualquier
individuo, es decir, que incite al aprendizaje, retroalimentar cuando sea
necesario y sobre todo no hacer cambios o tomar decisiones que no incluyan el
reforzar un conocimiento que ha nacido en ellos.
En muchas ocasiones no tenemos la iniciativa por saber que
conocimientos han adquirido anteriormente y con ello poder partir hacia uno
nuevo (más profundo). Evaluar con base a sus características, actitudes,
valores y procesos de aprendizaje sería lo más viable, pero ¿lo hacemos?,
analicemos esa cuestión y veremos que no es tan sencillo como parece, quizá,
pero nuestra labor es esa… estimular, prestar atención, reforzar, brindar, etc.
Por tal motivo, pienso que el tomar al alumno como centro
universal de nuestras acciones y
estrategias de enseñanza ¡nos llevará al éxito!
Reflexión- Yare e Itzel :)
ResponderEliminarSiguiendo con la evaluación como un proceso instrumental, en el proceso de instrucción, dentro de la situación educativa, nos referimos al hecho de diseñar a raíz de todo lo anterior, actividades que provean a todos los alumnos de escepticismo encaminado hacia el crecimiento tan instruccional como individual.
En este momento del texto, hablamos de la eficacia y eficiencia en la práctica de la planeación en un campo definido de estudio, puesto que es entonces cuando estamos dispuestos a tomar decisiones en situaciones difíciles o que obstaculicen el aprendizaje sustancial de un contenido.
Es en este momento, que surge el docente como guía no solo del trabajo sino el coordinador de las habilidades de todo el espacio muestra o de toda la población.
Así que este texto, propone un panorama conceptual y técnico muy eficiente, para aplicar dentro de la planeación en un principio, y como habilitador de las capacidades de reacción o solución a situaciones improvisadas, tomando decisiones, orientando de nueva cuenta la enseñanza y dando como consecuencia una evaluación tanto del alumno a la hora del trabajo como del maestro a la hora de enseñar.